Agosto en Latinoamérica no es un mes cualquiera. Es ese mes que hay que “pasar”, el que aprieta sin preguntar. Y en una región donde ya hay más de 88 millones de personas mayores de 60 años –13,4 % de la población–, y se proyecta que ese grupo supere el 25 % hacia 2050, según datos de la CEPAL. Todos estos antecedentes, muestran que la economía silver dejó de ser un concepto del futuro: es el nuevo terreno donde se emprende, se vende, se compite y se resiste.
Emprender en una “economía plateada” no es solo venderle a la tercera edad. Es operar en un ecosistema que envejece, donde los hábitos cambian, el consumo se desacelera y los ciclos se alargan. Hoy, más del 50 % del gasto en salud en Latam está vinculado a enfermedades crónicas asociadas al envejecimiento, y eso mueve el tablero: hay emprendedores que ya están leyendo este cambio y construyendo soluciones para acompañarlo.
No cualquiera enfrenta agosto, y sobre todo un agosto que perdura más de un solo mes. Lo hace el “gato emprendedor”, ese felino latino que no nació en Silicon Valley ni sueña con rondas millonarias –por ahora…–, sino que sobrevive entre la inflación, los cambios del algoritmo y hasta el WhatsApp caído. Un gato que sabe que en agosto no se gana, se resiste. Y si puede, se reinventa.
No hay unicornio que valga. Hay que tener espalda, o al menos uñas fuertes. En un lapso donde el crédito se frena, los clientes se evaporan y la energía baja, ahí está el gato, ese de barrio, que sabe improvisar con poco, ajustar el pitch y sobrevivir sin pedir permiso.
Pero ¿por qué importa la silver economy en todo esto? porque cuando una región envejece, también cambian las oportunidades. Se abre un espacio para emprender con propósito, con modelos más humanos, duraderos y menos acelerados. Y eso, aunque no lo digan los inversionistas, también es crecimiento. La economía plateada no es un fenómeno marginal. En países como Chile, Uruguay, Costa Rica o Argentina, la población mayor crece más rápido que cualquier otro grupo etario. Y eso cambia todo.
Por ejemplo, en tierras chilenas, BondUp una red social para personas +55 años que entrega experiencias y conexiones que promueven su felicidad, salud y bienestar. Cuenta con más de 14 mil usuarios quienes pueden acceder a cientos de actividades y talleres para conectar y hacer amistades. Pero no solo eso, ya que también ofrece espacios para conectar, hacer amistades y participar en diversas actividades. Por su parte, la colombiana Avista ha ganado atención por ofrecer liquidez a personas mayores mediante créditos adaptados. En este contexto, el éxito no viene de ir rápido, sino de saber cuándo moverse. Ahí es donde el “gato emprendedor” brilla, ya que observa, afila las uñas y salta justo cuando nadie lo espera.
De hecho, la economía plateada también es una oportunidad de mercado. Según la CEPAL, si se activara plenamente el potencial económico de las personas mayores en la región, se podrían generar millones en PIB adicionales en los próximos años. De hecho, estimaciones del BID y la OCDE proyectan que la silver economy podría mover más de US$ 2 billones anuales en América Latina y el Caribe hacia 2030. Por eso, en este agosto, no te frustres si todo va más lento de lo habitual. Mejor afila el instinto, agáchate y prepárate para saltar como buen “gato emprendedor”.
Por: Lucas Saavedra N / Periodista





