Hoy en día, agosto se ha transformado en un mes estratégico para lanzar campañas comunicacionales orientadas al fundraising en América Latina. Lo anterior, debido a que coincide con el cierre del segundo trimestre fiscal, así como también con el inicio de la planificación presupuestaria para el año siguiente y una reactivación del interés inversor.
De acuerdo a un estudio de Cuantico VC, el último trimestre de 2024 fue el más activo en cuanto a inversión en más de dos años, alcanzando un volumen de financiamiento de 1.23 mil millones de dólares. Dicho crecimiento, se generó luego de un periodo de contracción conocido como el “VC Winter”, el cual estuvo marcado por altas tasas de interés y una gran exigencia de sostenibilidad económica.
Bajo ese contexto, las startups y organizaciones que comienzan sus campañas en agosto, consiguen posicionarse justo en el momento en el que los fondos se encuentran evaluando nuevas oportunidades y ajustando sus portafolios.
Teniendo en consideración lo mencionado, este mes se posiciona como el punto de inflexión: los inversionistas empiezan a mirar hacia el cierre del 2025 e inicios del 2026, y las startups que consiguen dar a conocer propuestas claras, eficientes y bien comunicadas poseen una ventaja competitiva real.
Sobre levantamiento de capital, datos de Endeavor México y Glisco Partners dan cuenta de que durante el primer semestre de 2024 los emprendimientos tecnológicos latinoamericanos recaudaron 1.1 mil millones de dólares; un aumento del 30% en comparación al mismo periodo de 2023.
En este nuevo entorno que se ha formado, los inversionistas tienen como prioridad planes compuestos por sostenibilidad, tecnología aplicada y escalabilidad. Por lo tanto, agosto no solo se consolida como un buen momento para comunicar, sino que también para demostrar preparación, es decir, tener el pitch listo, afinar los indicadores y una narrativa que resulte coherente y se relacione con las preocupaciones actuales del capital.
A raíz de lo anterior, para quienes quieren aplicar a fondos o atraer inversionistas, la recomendación es hacerlo en agosto y enfocarlo como el periodo que se activa la visibilidad del negocio. Es que se trata del momento en que los fondos se encuentran más receptivos, los ciclos de decisión se aceleran y las oportunidades se multiplican para los que consiguen diferenciarse del resto.
Por: Josefina Vives / Periodista





